jueves, 7 de enero de 2010

Por el derecho a vivir sin angustia

Hay algunas cosas que me parecen vergonzosas. Una de ellas son las mujeres que se supeditan a lo que quieren sus novios, maridos, padres o esposos de tal manera que piensan y actúan como ellos quieren que ellas hagan y además obligan a otras mujeres a actuar de esa manera.

Esta el caso por ejemplo de la mujer maltratada emocionalmente que pide ayuda a otra mujer y esta le dice que debe aguantar porque es su obligación satisfacer y atender a su marido.

Esta el caso de las mujeres activistas radicales antiaborto que trabajan activamente en hacer sentirse culpables a las mujeres tan desesperadas como para tomar una medida así de drástica. El aborto existe, no es algo agradable ni placentero y no se hace por afición, parece que estas mujeres no se han enterado, pero hoy es un buen día para recordar lo que pienso y lo que no pienso acerca del aborto.

Cuando tener un hijo va a suponer una terrible desgracia para la madre hasta tal punto en el que ella preferiría estar muerta y no ve posibilidad de salir de esa situación tiene dos opciones, una de ellas es suicidarse, por lo que ni ella ni su futuro hijo vivirán. Otra casi igual de drástica es no tener ese hijo, con lo que ella seguiría viva, aunque su futuro hijo no lo hará y no se pierde una vida y una futura vida, sino sólo la futura, auqnue seguramente a esa mujer le pese su decisión durante toda su vida.

La solución no es culpabilizarla y hacer que desee que en lugar de plantearse abortar se quiera suicidar, eso no es el derecho a la vida. La solución es asistencia social para ayudar a esa mujer a salir de una vida en la que sí tiene un hijo se enfrenta a morirse de hambre (y que su hijo se muera con ella), a sufrir la ira de otras personas a que la maten o a la situación esa que es tan terrible como para haberse planteado el aborto. De esta manera puede tener su hijo y quedárselo o entregarlo en adopción si no puede cuidar de él.

No comprendo como hay mujeres que no entiendes esto tan sencillo. No quiero decir que las mujeres tengan que estar siempre de lado de las mujeres y los hombres de lado de los hombres, las personas deberían estar de lado de la persona que confía en ellas y les pide ayuda.

2 comentarios:

Nebulina dijo...

Me estoy callando todo lo que pienso del circo que están montando con el aborto porque...es mejor, mejor que no salte
Un beso!

Canapé dijo...

En este mundo hay gente para todo. Hay gente que considera que el papa es un lagarto espacial de una raza alienígena que se disfraza de humana y en realidad quiere conquistar nuestro universo. Hay quien cree que la evolución es una patraña de los gobiernos para sorbernos el cerebro y apartarnos de la verdad.

Lo cierto es que a mí, personalmente, me fastidia, es que a las mujeres no se las deje decidir. Que podamos decidir sobre nuestro cuerpo, nuestro futuro, nuestro puesto laboral, nuestras relaciones sexuales y todo lo demás. Que si quiere ser lo que otra persona quiere que sea, adelante. Que si quiere cumplir con un estereotipo de Hollywood, adelante. Que si quiere hacer X o Y, adelante.

Y, desde luego, tener un hijo es un hecho que concierne única y exclusivamente a la mujer que lo lleva dentro. Por mucho que el semen sea de un tío que queire el hijo. Por mucho que el bebé tenga derecho a vivir. Mientras sean las mujeres las que llevan el bulto 9 meses, serán ellas las que decidan. Cuando lo lleven otros, que decidan ellos.

Y los que quieren decidir por los demás, sea decidir lo que debe hacer una mujer con su embarazo o lo que debo hacer yo con mi sexualidad, que sigan intentando cambiar lo que quieran, no van a lograr nada útil y mucho menos duradero en una sociedad occidental que ya ha empezado a ver la luz.